sábado, 23 de diciembre de 2017

La historia de este perrito que esperó durante tres años a su dueña tocará tu corazón



La mayoría de nosotros hemos experimentado lo que se siente al perder a alguien a quien amamos. Aunque podemos desear y esperar que esa persona regrese, no siempre es posible.
Tal era el caso de un perro, cuya dueña se marchó un día, para nunca volver, pero la esperanza y la lealtad lo inspiraron a sentarse junto a la puerta y esperarla todos los días durante 3 años.
Durante tres años,
Fu Shi se sentó junto al callejón frente a la casa de su propietario en la ciudad portuaria meridional de Busan, Corea del Sur.
Se sentaba allí hasta el anochecer, contemplando el camino con una expresión extravagante, esperando fielmente que su dueña volviera a casa, pero nunca lo hizo.



El perro aparentemente estaba abandonado, después de que su dueña fuera trasladada a un asilo de ancianos, probablemente para nunca volver, aunque parecía que el perro entristecido sólo esperaba verla volver a casa.



La anciana había rescatado a Fu Shi cuando era una mascota vagabunda y vivía en la calle.
Vivieron juntos felizmente durante unos cuantos años, en el que ella lo sacaba a pasear, informó sina.



Pero estos días felices se desvanecieron cuando la anciana sufrió una hemorragia cerebral hace tres años.
La condición le provocó demencia, y ha estado viviendo en un hogar de ancianos desde entonces. Después de que la anciana se fue, el perro volvió a quedarse solo.






Según los vecinos, Fu Shi se refugia en la casa abandonada al caer la noche, y se alimenta con la comida que le dan los vecinos, quienes están conmovidos por su lealtad.





Al ver la triste situación de Fu Shi, uno de los vecinos se puso en contacto con un refugio de animales, que envió a algunos cuidadores a su rescate.
Después de un chequeo, el perro de 8 años de edad, se encontró tenía gusanos intestinales, aunque afortunadamente, se recuperó después del tratamiento.



Según fuentes, aunque la anciana nunca regresó, Fu Shi finalmente encontró un nuevo hogar para siempre.
Fue renombrado, “Sky” por su nuevo propietario.
Con suerte, Fu Shi nunca se quedará solo de nuevo.

¡Bendiciones para este perro fiel!

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